Un genograma es una herramienta super importante para estudiar y conocer el historial familiar en forma de mapa, ya que con el se pueden ver los principales eventos de los miembros de la familia a lo largo de diversas generaciones. El árbol familiar tiene algunas similitudes con un árbol genealógico, pero este describe las relaciones familiares mediante una serie de símbolos estándar.
Se utiliza para, de una sola ojeada, identificar patrones que se repiten, tipos de relación y la secuencia vital de las personas que hay en él.
El árbol familiar es intemporal, es decir, la información que muestra de cada persona sigue siendo válida con el paso de los años, ya que informa de las fechas en las que se produjeron los hechos vitales.
El árbol genealógico no sigue rígidas normas en cuanto a su composición, sino que prevalece la parte artística; tradicionalmente se representa emulando el “árbol de la vida”, colocando a las personas principales en el tronco y a su descendencia (o sus antepasados) en las ramas del árbol, aunque existen diferentes tipos, que incluyen incluso fotografías de los familiares. Elaborar tu genograma te ayuda a conocerte mejor a encontrar esas dinámicas y esas virtudes que traes de tu sistema y también ayudas a sanar el sistema para las nuevas generaciones.